Por: Mariana Aguilar / Bachillerato
Tras el brote de violencia en el Clásico Tapatío, el pasado sábado, los directivos de Chivas, Atlas y la Liga MX se encuentran en pláticas sobre el comportamiento de los aficionados en el Estadio Jalisco, con la finalidad de encontrar la manera de castigar a los responsables de tales actos.
Sin embargo, mientras esto sucede, una de las porras involucradas, pide ayuda para liberar a los detenidos. Mediante su cuenta de Facebook, la 'Banda de la Reja' asegura que “hay un aproximado de 10 a 15 detenidos, estos integran distintas bandas en Chivas tanto de Guadalajara como del D.F., las acusaciones son por daños y lesiones, aún no declaran todos y es por esto que aún no se les levanta en sí una acta ni se notifica el monto a pagar, pero ponemos a conocimiento público el número de cuenta donde podrán apoyar económicamente para poder solventar estos gastos”, dice este grupo de animación.
La ‘Banda de la Reja’ alega que lo acontecido fue una reacción en contra del abuso de la autoridad.
“Lo que pasó el sábado por la noche no tiene justificacion alguna, pero si la policía únicamente hubiera cumplido con su trabajo no hubiera pasado todo esto, ya que ellos al llegar a las tribunas no buscaban a quién detener sino solo ABUSABAN DE SU PODER y comenzaron a golpear a todos, actos que causaron una reacción natural en cualquier ser humano” concreta la publicación.
Independientemente de lo anterior, Decio de María, presidente de la Liga MX, aceptó que "los protocolos y las medidas han sido rebasados" y que lo conveniente será "alejar (del futbol) a quienes no compartan lo que desea la mayoría, que es pasarla bien" ya que “lo que se dio no tiene nombre”.
Por lo pronto, la Comisión Disciplinaria dio a conocer que se impone un partido de veto al Estadio Jalisco así como una multa de cinco mil días de salario mínimo vigente al conjunto de Atlas. En el caso de Chivas, se prohibe vender boletos a sus grupos de animación para todos sus partidos por tiempo indefinido.
