viernes, 5 de junio de 2015

Campeones con otros colores en Copa América

Selección Boliviana campeona en 1962 / Fotografía: Especial

Por: Adán Manzano Aguilar / Bachillerato JRF
En la Copa América, a lo largo de sus 43 ediciones, la mayor parte de los países campeones del certamen han sido dirigidos por estrategas nacionales. Pero, solo dos entrenadores extranjeros se han coronado. El brasileño Danilo Alvim con Bolivia en 1963, y el inglés Jack Greenwall, quien comando a Perú al campeonato en 1939, han sido los únicos dos dirigentes que se han encargado de consagrar a un país ajeno a su nacionalidad.
El británico, quien disputó la mayor parte de su carrera como jugador y entrenador y consiguió palmarés en ambos roles con Barcelona de España, fue escogido en 1939 para liderar a la selección peruana, quien fue el país anfitrión de aquella edición. Greenwall fue elegido gracias a su triunfo en la liga local con el equipo peruano de Universitario de Deportes.
El campeonato de la selección “Rojiblanca” fue considerado por algunos investigadores sociales, como el “Mayor Logro” de la nación, desde su independencia.
Cinco equipos disputaron el torneo en un sistema de liga a una sola vuelta. El cuadro “Inca” inició su participación con un triunfo 5-2 sobre su similar de Ecuador. Encuentro que género morbo debido a la guerra que habían protagonizado ambas naciones dos años antes.
Su siguiente oponente fue Chile, a quien superó 3-1. No solo la rivalidad deportiva gobernó alrededor del cotejo, sino social, ya que se cumplían tres años desde la salida de Chile de la ciudad de Tacna, Perú. Aquel país vivió crisis sociales, pero el fútbol le dio otra oportunidad ante sus ocupantes.
Para su tercer compromiso, los peruanos superaron con un contundente 3-0 a Paraguay, y consumaron el campeonato al imponerse 2-1 ante Uruguay y convertirse en campeones de Sudamérica, en su casa y ante su afición. Los “Bicolores” fueron el único equipo invicto del certamen al ganar todos sus encuentros, de la mano de un técnico europeo.
24 años después, otro ex futbolista repitió la hazaña. El “Maracanazo”, aquel duelo donde Uruguay se coronó campeón del mundo en 1950 ante el anfitrión, Brasil, y arruinó la fiesta de un país entero, tuvo secuelas en las calles, en la afición y en los jugadores “cariocas”. Entre esos jugadores se encontraba Danilo Alvim.
El ex jugador disputó el “Maracanazo”, el cual, según Alvim, “arruinó su carrera futbolística”. Sin embargo, en los inicios de su carrera como Director Técnico, el país de Bolivia requirió de sus servicios para la Copa Sudamericana, en la cual serían anfitriones. El brasileño respondió a la confianza con un campeonato continental.
La escuadra local comenzó su misión en la XXII edición, celebrada en 1963, ante Ecuador. Remontó e igualó 4-4 en aquel encuentro. El formato de la competencia seguía con un sistema de todos contra todos a un solo duelo. Bolivia se impuso 2-1 en su segundo encuentro ante su similar de Colombia.
En su tercer duelo, se llevó la victoria al ganar 3-2 a Perú. Coronó su cuarta victoria consecutiva al derrotar 2-0 a Paraguay y apuntarse como el único país invicto. Los “Altiplánicos” disputaron sus dos últimos duelos superando 3-2 a Argentina y culminó su coronación al ganarle 5-4 al vigente campeón del mundo, Brasil, quien lo había logrado en Chile 1962.

Ambos entrenadores extranjeros al país que dirigían, aprovecharon la oportunidad de que su equipo fue sede para edificarse como campeones de Sudamérica. Ambos estrategas ya fallecieron, pero el recuerdo de sus hazañas aún queda vivo en las naciones a las que llevaron a lo más alto del pedestal.