viernes, 10 de abril de 2015

León y Pizzi, en vías de reencontrarse


Por: Paulina Grajeda / Licenciatura

Resurgir de las cenizas no es sencillo. Las cosas se tornan aún más complicadas cuando el pasado te avala como uno de los mejores equipos de los últimos dos años. Juan Antonio Pizzi tomó las riendas del León cuando Gustavo Matosas dejó al equipo. Era de esperarse: el proceso de cambio traería complicaciones, y no es para menos, el argentino naturalizado uruguayo se proclamó bicampeón del futbol mexicano.
La vara quedó alta para Pizzi. Las comparaciones comenzaron a surgir desde el primer partido que encaró, pues fue, justamente, frente a Matosas. Llegó la caída de la Fiera en la jornada uno (3-2). Una derrota más en la fecha dos:  contra Tigres (0-1).
Dos empates al hilo en los siguientes duelos. Fue hasta la jornada cinco cuando llegaron las victorias: frente a Pumas (1-3) y Leones Negros (2-1). Caída contra Pachuca (2-1) y duelo ganado contra Santos (2-1). Entonces, empezó la racha negativa que ha durado hasta ahora.
Actualmente, León suma cuatro partidos sin ganar: derrota, empate, derrota, derrota. Por si esto fuera poco, en esos cotejos ha recibido 12 tantos por siete anotados. Dos goleadas de escándalo: contra Monterrey (5-1) y Querétaro (4-5). 
Pese a la situación adversa que se vive en el seno esmeralda, hay tranquilidad, pero no echan campanas al vuelo. Pizzi asume responsabilidades, pero no tira la toalla. Él confía en que todo es un proceso.
Pese a que la afición verdiblanca pide su salida por los malos resultados, la directiva lo ha respaldado; es bien sabido que en el Bajío no toman decisiones prematuras aunque se generen interrogantes en un cúmulo de fechas.

El accionar de León ha dejado dudas; la zaga cada vez luce más débil, la media no genera tanto peligro ni logra recuperar el esférico con facilidad, la delantera no es contundente y tiene problemas para ir al frente; hay una fiesta trasnochada con los Panzas Verdes quienes parecen extrañar a Matosas, pero quieren dejarlo de lado para empezar un nuevo ciclo de la mano de Juan Antonio Pizzi.